Alda Merini

Alda Merini

Foto wiikipedia: Alda Merini
Foto wiikipedia: Alda Merini

 

 

Los versos son polvo sellado
de un tormento mío de amor,
pero afuera el aire es preciso,
cambiante y dulce y el sol
te habla de caras promesas,
así, cuando escribo
inclino la cabeza hacia el polvo
y anhelo el viento, el sol
y mi piel de mujer
contra la piel de un hombre.

Este es un verso extraído de La Terra Santa, un libro de poesías que  Alda Giuseppina Angela Merini, escribió en 1979 y que fue publicado en 1984. Consta de cuarenta poemas y son el testimonio del dolor soportado durante once años de internamiento en el Hospital Psiquiátrico Paolo Pini de Milán (Italia). En estos poemas no existe la lamentación de la autora. En ellos anida la reflexión sobre la incomunicación impuesta, la soledad forzada y la enajenación soportada… Para Alda, el manicomio se convierte en una Tierra Santa cruel, un lugar de expiación, una morada de muertos en vida, de personas aisladas de la sociedad.

He conocido Jericó,
he tenido también yo mi propia Palestina,
los muros del manicomio
eran los muros de Jericó
y un pozo de agua infecta
nos ha bautizado a todos.

Fuimos lavados y sepultados,
olíamos a incienso.
Y después, cuando amábamos
nos hacían el electroshock
porque, decían, un loco
no puede amar a nadie.

Pero un día desde dentro del sepulcro
también yo me volví a despertar
y también yo como Jesús
tuve mi propia resurrección,
pero no subí a los cielos
descendí al infierno
desde donde vigilo asombrada
los muros de la antigua Jericó.

La Terra Santa (1984)

Alda Merini, nacida un 21 de marzo de 1931 en Milán, fue una de la más importante poetisa de la poesía italiana del siglo XX. Dotada precozmente con el don de la escritura, publicó sus primeros poemas con tan solo quince años. Giacinto Spagnoletti, profesor y crítico literario, fue su descubridor. Su apoyo, protección y el talento de Alda, hizo posible que fuera reconocida y consiguiera publicar sus poemas iniciales.

En 1947, tenía Alda dieciséis años, aparece como ella misma definiría posteriormente a dicho estado: «Las primeras sombras de su mente» y es internada en el Hospital Psiquiátrico de San Raffaele Turro de Milán. Durante un mes estaría Alda recluida en dicho sanatorio. A su regreso, Giorgio Manganelli, amigo personal de Alda y preocupado por su estabilidad emocional, le obliga a someterse a terapia con los psicoanalistas Fornari y Cesare Musatti.

En 1950, es incluida en una «Antologia della poesia italiana 1909-1948» que fue editada por Giacinto Spagnoletti. En 1951, publica dos poemas inéditos en el libro Poetesse del Novecento. En esa etapa de su obra iniciaría temáticas que serían recurrentes en la poesía de Merini: El erotismo y el misticismo.

En 1953 edita su primer volumen de poemas titulado: La presenza di Orfeo, con un notable éxito de crítica. En ese mismo año contrae matrimonio con Ettore Carniti, empresario y dueño de algunas panaderías de Milán. Dos años más tarde publica Nozze Romane (Bodas Romanas) y Paura di Dio (Miedo de Dios). En 1955, concibe a su primera hija Emanuela. En 1961 publica una selección de versos con el título: Tu sei Pietro (Tú eres Pedro) dedicado al médico que cuidó de su hija, Pietro De Paschale.

Una disputa conyugal, provoca que Alda sufra una recaída. El origen del altercado fue que Ettore, su marido, se presento ebrio habiéndose gastado todo el jornal en una noche con sus amigos. Discutieron y ella reacciona violentamente golpeándole con una silla. Debido a ello es internada en el Hospital Psiquiátrico Paolo Pini. El internamiento se prolonga hasta 1972. Debido a ello, Alda se sume en un periodo de silencio y aislamiento, como referencio al principio del artículo. Durante estos once años de tratamiento, Alda tuvo etapas en las que volvía a su casa permitiéndole incluso llevar, en parte, una vida conyugal normal, fruto de la cual concibió tres hijos más. Siempre lamentó no poder estar con ellas, fueron criadas por otras familias debido a su incapacidad en esa etapa de su vida.

«No sé como encontré el tiempo para tenerlas. Se llaman Emanuela, Bárbara, Flavia y Simonetta. Siempre les digo que no digan que son las hijas de la poetisa Alda Merini. Esa loca. Ellas responden que soy su madre y basta, que no se avergüenzan de mí. Me conmueven»

En 1981 fallece su marido. Ante este nuevo periodo de soledad, esta vez originado por otro motivo, inicia una correspondencia telefónica con el poeta Michele Pierri, con quien comparte largos debates sobre poesía. En 1983 se casa con Michele y se traslada a Tarento, donde residiría tres años. Escribe en ese tiempo La gazza ladra (La urraca ladrona). Dicha obra compuesta de veinte poemas es una alusión a una famosa ópera homónima de Rossini. Otra obra que escribe es L’altra verità. Diario di una diversa (La otra verdad. Diario de una distinta).

Una recaída la obliga a regresar a Milán y someterse al tratamiento de la doctora Marcella Rizzo, gracias al cual gozaría de un periodo de estabilidad psicológica y de una actividad literaria inusual.

Sus obras se van sucediendo. Fogli bianchi (1987) su primer libro en prosa. Testamento (1988). Delirio amoroso (1989). Il tormento delle figure (El tormento de las figuras, 1990).

En los años venideros se consolida su regreso al escenario literario. En 1993 gana el Premio Librex-Guggenheim «Eugenio Montale» en la categoría de poesía. Un galardón que la consagra entre los grandes literatos contemporáneos italianos. Todo el dinero que obtuvo de dicho premio fue donado por Alda a las personas sin hogar y a mendigos con los que se cruza por la calle.

Alda continuaría escribiendo obras como Titano amori intorno (Amores en torno a Titán, 1994), Sogno e Poesía (Sueño y Poesía, 1994), Reato di vita, autobiografía e poesía (Delito de vida, autobiografía y poesía, 1994), La pazza della porta accanto (La loca de la puerta de al lado, 1995) y Einaudi Ballate non pagate (Baladas no pagadas, 1995).

Gana el premio Vareggio por La vita facile en 1996. El premio Procida-Elsa Morante en 1997. En ese mismo año es candidata al Premio Nobel, pero finalmente no le fue concedido.

En sus últimos años, influenciada por Arnoldo Mosca Mondado, su obra adquiere un carácter espiritual y religioso, así crea obras como L’anima innamorata (2000), Corpo d’amore (2004), Poema della croce (2005) y Francesco, canto di una creatura (2007).

Recibe la Orden al Mérito de la República Italiana en 2002.

En 2004 la cantante Milva editó un disco: Milva canta a Merini con canciones compuestas por Giovanni Nuti sobre poemas de Alda Merini. En el mes de julio de ese mismo año Federico Gozzellino interpreta seis cantatas basadas en poemas de Merini.

En 2005 se publica Nel cerchio di un pensiero, teatro per voce sola (En el círculo de un pensamiento, teatro para voz solista), donde se registran los dictados telefónicos a Marco Campedelli.

La nera novella, una novela publicada en 2006, realiza una incursión al género negro, al parecer no existe traducción al español.

En 2007 fue nombrada doctora honoris causa por la Universidad de Mesina.

Alda Merini falleció en la indigencia por elección personal el 1 de noviembre de 2009 en Milán, a consecuencia de un tumor óseo. Hasta el último momento siguió fumando sus cigarrillos, era una fumadora empedernida.

Foto wikipedia: Alda Merini
Foto wikipedia: Alda Merini

 

 

 

 

 

 

 

Opinión

Existe casi siempre una línea muy fina entre genialidad y locura. Muchos otros escritores fueron víctimas de esta situación. En ese proceso de lucha interna, el genio casi siempre termina por imponerse a la locura.
Alda pasó por ese proceso y su talento prevaleció, dejándonos su testimonio expresado en sus poemas. Fue una artista transgresora para su tiempo. Tal vez le ayudo la desinhibición causada por su enfermad mental a la hora de transcribir sus sentimientos sin ningún tipo de aderezos, eso y su genial talento como literata.
Sirva este artículo, en el día de su onomástica, para reivindicar a una sublime poetisa sin ningún eco mediático y que nunca debería de perderse en el olvido.

Traducciones al español

 
Poesías de Alda Merini.
Traducción: Mercedes Arriaga Flórez. Sevilla: Fundación Cajasol, 1999.

La tierra santa.
Editorial Pre-Textos. 2002.

Baladas no pagadas.

Traductora: Jeannette Lozano Clariond. Barcelona: La Poesía, señor hidalgo, 2005.

Magnificat: un encuentro con María.
Traducción: Jeannette Lozano Clariond. México: Vaso Roto Ediciones, 2007.

Clínica del abandono

Traducción, prólogo y notas: Delfina Muschietti. Buenos Aires: Bajo la Luna, 2008.

 

DESAPARECIDOS (II)

«Nadie puede desaparecer así, sin testigos, como si se lo hubiese tragado la tierra»

.El Caso del niño Pintor de Málaga.

David_Guerrero_Guevara  Era una tarde del 6 de abril de 1987 en Málaga, cuando David Guerrero Guevara salió de su casa dirección a la Galería de arte La Maison. Allí, por primera vez, exponían uno de sus cuadros, era un sueño hecho realidad para un joven de tan sólo 13 años que se dedicaba a su gran pasión: La pintura. Dicha galería inauguraba la exposición Recorriendo la Semana Santa, y uno de los cuadros de David: El Cristo de la Buena Muerte, había sido seleccionado.

El Cristo de la Buena Muerte
El Cristo de la Buena Muerte

Solo tendría que recorrer una distancia de cien metros, que era la que separaba de la puerta de su casa hasta la parada del autobús que le llevaría a La Maison. Era un día especial para David, y curiosamente en ese mismo día coincidía con la visita de S.M. la Reina Sofía a la ciudad con motivo de la reinauguración del teatro Cervantes. Y la zona por donde David debía desplazarse se encontraba dentro de ese itinerario y por tanto fuertemente vigilada.

Sin embargo, David nunca llegaría a la exposición y jamás volvería a su casa.

Venida la noche y tal como su padre convino con él previamente a la exposición, fue a La Maison a recogerle. Cuando llegó vio que no se hallaba allí. Inmediatamente fue al aula de arte que eligieron ambos, como segunda opción, en el caso de que no estuviera en La Maison para recogerle. Tampoco estaba allí y nadie lo había visto. Regreso a la Galería de nuevo y preguntó por él y la respuesta fue la misma…nadie había visto a David.

Tenso por la situación, se dirigió a casa con el pensamiento de que seguramente ya estaría allí. Pero desdichadamente no fue así. Transcurridas veinticuatro horas, y tal como establece el protocolo por desapariciones, fueron a la comisaría denunciando la situación.

Portada Diario Sur (Málaga)
Portada Diario Sur (Málaga)

Se activó inmediatamente el procedimiento determinado para estos casos por las fuerzas policiales, iniciando la búsqueda por la zona y alrededores. La búsqueda fue incesante durante semanas, pero sin obtener resultado satisfactorio alguno.

En la ciudad se originaban espontáneamente por parte de los ciudadanos labores de búsqueda. También se produjeron manifestaciones reclamando a las autoridades judiciales y fuerzas de seguridad, que activaran todos los recursos disponibles para hallar a David Guerrero.

Esta presión ciudadana, tuvo como réplica un despliegue de búsqueda más intenso, así como la coordinación entre fuerzas policiales, sanitarias, investigadoras y militares que trabajaron conjuntamente en la búsqueda de David.

Todas las investigaciones, búsquedas, análisis de supuestas pruebas no alcanzaron su propósito final: localizar a David. Los meses transcurrían, Instituciones oficiales y ONG participaron en esta insólita y dramática búsqueda de un joven de trece años desaparecido en Málaga.

Se atisbó una esperanza cuando se identificó a un ciudadano de origen suizo de setenta años de edad y que podría estar implicado en la desaparición. Dicho individuo se hospedó en un hotel de la ciudad entre los meses de marzo y abril de 1987, y debido al testimonio de una empleada del hotel la conexión entre éste y David parecía tomar fuerza. Se pudo averiguar que su situación civil era divorciado, tenía varios hijos y que se hallaba en una buena posición económica. En el transcurso de esta investigación, se encontraron entre las pinturas de David, una caricatura con semejanza al rostro del sospechoso. La investigación parecía avanzar pero, cosa del destino, se interrumpió debido al fallecimiento del sospechoso en 1990.

Caricatura sospechoso
Caricatura sospechoso

El tiempo seguía su ineludible marcha, y David continuaba desaparecido. Hallaron el cadáver de un joven en Gibralfaro, pero las pruebas de ADN descartaron que se tratase de David. Nada, sin rastros, sin pistas, algunas llamadas de personas que creían haberlo visto en Portugal, en Almería, etc., todas investigadas y sin éxito alguno.

La policía estaba desconcertada, en palabras del comisario José María García Calabuig: «nos encontramos con un gran problema y es que nadie lo vio salir de su casa, no hay testigos, ni indicios, lo que nos lleva a la suposición de que lo esperaban«. Otras declaraciones como la pronunciada por José Luis Calvo, presidente de PRODENI, demostraban la frustración que sentían: «Lo que hace diferente este caso es que no hay nada. Es como si se lo hubiera tragado la tierra. Muchas veces he llegado a pensar que si alguien quisiera hacer desaparecer a una persona tendría que utilizar el mismo método. En el caso de David Guerrero no hay nada. Se han planteado mil hipótesis. Se ha buscado en todos lados. Se ha investigado cualquier pista que nos ha llegado…Nadie puede desaparecer así

La única realidad es que han pasado veintiséis años desde la desaparición de David, un joven que en un trayecto de apenas cien metros desaparece sin dejar ningún rastro alguno y al parecer sin ser visto por nadie. Y solo queda una familia que se aferra a la esperanza de que un día su hijo vuelva a abrir esa puerta que cerró tras su partida.

Fuente: malagahoy.es